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El Director de Tecnologías de la información del Grupo Hiemesa, Juan Manuel García, ha participado recientemente en el debate «El empleado del futuro: más productivo y ultraconectado» celebrado en la Torre Telefónica Diagonal 00, organizado por Encuentros en La Vanguardia, con la colaboración de Telefónica Empresas.

Este evento contó con la presencia y la participación del Director de Telefónica Empresas en Catalunya, Enrique Santiago; la Directora del departamento de Operaciones, innovación y Data Sciences de Esade, Núria Agell; el Jefe de operaciones de Tecnologías de la información del Futbol Club Barcelona, Josep Toledo, y el director de Planificación Estratégica y tecnologías de la información de Phibo, Luis Laresgoiti, además del ya mencionado Director de Tecnologías de la información del Grupo Hiemesa, Juan Manuel García.

En este foro, se habló principalmente de mensajería instantánea, correo electrónico, redes sociales, comercio online y aplicaciones de todo tipo que están a un clic de millones de ciudadanos de todo el mundo y de cómo esta transformación se ha desarrollado de este modo gracias a la conectividad, que permite a las personas comunicarse desde cualquier lugar y en cualquier momento, cuestionando si esto es también aplicable al puesto de trabajo y qué oportunidades y qué retos plantea la digitalización para empresas y profesionales.

Además, se abordó como la tecnología aplicada al puesto de trabajo mejora la productividad, la relación con los Clientes, la igualdad de oportunidades (tanto de género como de capacidades) y la conciliación, con el importante reto de proteger la seguridad.
Entre otras afirmaciones, se pudo escuchar que, en las organizaciones del ámbito comercial, como, por ejemplo, el grupo de distribución siderúrgica Grupo Hiemesa, la conectividad facilita que se pueda llegar de una manera “más rápida y fácil” a los clientes. “Entre la empresa y los consumidores o usuarios, están los empleados”, insistió su Director de Tecnologías de la información. Según Juan Manuel García, “la movilidad de la red comercial” requiere de “accesibilidad desde cualquier lugar y dispositivo”. Se trata de un elemento clave para su organización, que logra retener el talento ya que “el personal se siente más cómodo trabajando de forma flexible”.
Por ello, señaló que, para las empresas, resulta crucial contar con “un socio tecnológico”, que “aporte soluciones” para ayudarlas a ser más competitivas, a la vez que preservan su seguridad.
La seguridad tanto en el ámbito privado como en el profesional, fue uno de los puntos que todos los participantes pusieron sobre la mesa, ya que indicaban que el empleado, como le pasa en su vida diaria, “no tiene la percepción de estar en un mundo peligroso del que debe protegerse”. “El mundo evoluciona muy rápidamente, y hay cuestiones relativas a la tecnología que se nos escapan”, admitió el Director de Tecnologías de la información del Grupo Hiemesa.
Así pues, todos los participantes concluyeron entre otras interesantes afirmaciones que “El empleado es el eslabón más débil en materia de seguridad. Hay que concienciar de los riesgos”.

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Además, los expertos coincidieron en que la incorporación de las nuevas generaciones digitales al mercado laboral es sumamente importante y hay que tomar en cuenta medidas para que ésta sea completa.

“La digitalización mejora la calidad del puesto de trabajo, introduciendo factores como la ética, la transparencia, la igualdad o la inclusión”. Estos valores ayudan a atraer el talento, especialmente entre los de la generación digital, que llegan a “aburrirse” si no se les plantean nuevos retos. En el Grupo Hiemesa, donde la media se sitúa en 45 años, “la permanencia en la empresa” ha aumentado, lo que García atribuye a la digitalización. La gestión de la diversidad es otro reto, ya que las nuevas generaciones, acostumbradas a aprender de forma autónoma y “absolutamente infieles tecnológicamente”, conviven actualmente en el puesto de trabajo con personas que “plantean resistencia al cambio”.

Como nota de optimismo para finalizar el debate, el director de Empresas de Telefónica en Catalunya, Enrique Santiago, se consideró “afortunado” porque “en las últimas tres décadas, el ser humano ha vivido más cambios que la humanidad en miles de años”, lo que comporta efectos de mejora del puesto de trabajo. “La tecnología permitirá que el puesto de trabajo sea cada vez más cómodo. La era en la que las personas nos adaptábamos a las máquinas se ha acabado”, vaticinó Enrique Santiago.

Noticia completa en La Vanguardia

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